Esta semana en Atacama ha estado marcada por la molestia manifestada a través de redes sociales y más formalmente con una carta que se hizo entrega al Ministerio tras la designación de la autoridad regional de cultura. ¿Qué dicen los artistas atacameños? Te lo contamos en la siguiente nota.
El día de ayer un grupo de artistas, gestores y trabajadores de las artes arribaron a las dependencias de la Seremi de Cultura, las Artes y el Patrimonio en la calle Atacama de la capital regional. El motivo: manifestar su molestia por la designación de una autoridad que según denuncian, no cumple con las expectativas técnicas que se tenían sobre esta autoridad.
En la carta difundida en redes sociales el Movimiento Dignidad Cultural Atacama, se detalla: «Como artistas, gestoras/es, docentes, trabajadoras/es de las artes, las culturas y el patrimonio, declaramos la urgencia de que el cargo de Seremi de Culturas, las Artes y el Patrimonio sea liderado por un/a profesional que posea las herramientas técnicas, experiencia en el área, formación, conocimiento del contexto regional en el área, y una visión alineada al perfil esperado para este cargo, con la finalidad de seguir avanzando en conjunto un área que sostenidamente en la región ha sido invisibilizada en su potencialidad e importancia«, detallan en la misiva firmada por cerca de 140 trabajadores del sector cultura en las distintas comunas de Atacama.
Conversamos con Bárbara Villarroel Barraza, vocera del movimiento quien nos explica que en las oficinas del ministerio se «levantó la formalización de un comunicado con el apoyo de artistas, gestores y gestoras del territorio que apoyan la designación de un seremi que tenga las competencias técnicas para el cargo». Consultada por el perfil que debería tener y por qué, indicó: «Que conozca las problemáticas del territorio en esta temática es lo que necesitamos. Este es un año es muy especial en cultura porque se levantan las Políticas Culturales en nuestra región y pedimos que sean llevado «.
Si bien no se hace alusión directamente a la persona designada, el trabajador social Roberto Córdova, sí se cuestiona la idoneidad del cargo desde lo técnico. Los solicitantes hablan de un perfil con trayectoria en la gestión o actividad artística como requisito.
El nombramiento de Seremis depende de la confianza que se le otorgue desde el gobierno en coordinación con las fuerzas políticas locales, no habiendo hasta ahora vocerías al respecto desde las entidades involucradas.
